Nunca, jamás entró en mis planes llegar a un parto sin conocer el sexo de mi bebé. Yo, que soy doña planificación, no entendí en su momento que mi cuñada tomara esa decisión con su primera hija. No la comprendía porque no entendía qué necesidad había de esperar varios meses. Es más, como ya mencioné en alguna ocasión, lo supe en los cuatro embarazos anteriores en la semana 12, muy pronto, vamos, que como veis no era yo de querer sorpresas. En cualquier caso, las razones por la que decidimos esperar al parto ya os la conté en un post durante el embarazo así que no me detengo en ello. Me voy a centrar en lo que supuso descubrir el sexo del bebé en el parto y también en sensaciones, intuiciones y «comeduras» varias de cabeza sobre el tema.
Descubrir el sexo del bebé en el parto, ¿intuía algo?
No, yo no intuí nada por síntomas ni porque alguien de mi entorno dijese nada porque nadie de mi familia ni amigos sabían nada. A veces quería convencerme de que era un embarazo que se parecía al de Carmen pero luego me daba cuenta de que era el más reciente, y que por eso encontraba similitudes. Pero yo realmente me encontré físicamente bien en los cinco embarazos y en todos tuve síntomas casi exactos así que las primeras veinte semanas no tenía ni idea y yo me iba mentalizando para otro niño, prefería no hacerme ilusiones porque obviamente tenía preferencia por tener otra niña.
Qué cosas me «mosquearon»
Y digo hasta la semana 20 porque en esa semana nos tocó ecografía y el ginecólogo se refirió al bebé como la criatura. Y os puedo decir que aquello me dio qué pensar. Maridín enseguida me dijo que no fuera paranoíca 😉 Y dejé de darle vueltas porque es cierto que yo alguna vez me he referido a mis hijos como las criaturas o las fieras, en un tono irónico, que es un tono muy típico del gine que hizo esa ecografía. Además, me decía a mí misma que qué sentido tenía darle vueltas a algo que no quieres saber. Y volví a mi pensamiento de que sería niño.
En la semana 33 tenía la tercera y previsiblemente última ecografía del embarazo por la Seguridad Social. Pero no fue la última porque vieron que el bebé estaba en un percentil bajo. ¿Cómo era posible habiendo siendo los niños tan grandes? Aquella semana lo pasé mal porque cualquier cosa que te digan que no es lo normal, tras haber pasado una mala experiencia, da pie a pensamientos negativos. Pero como intento siempre darle la vuelta a la tortilla, entonces me decía a mí misma que igual era un bebé pequeño porque era niña. Fijaos cómo la cabeza va por libre.
Descubrir el sexo del bebé en el parto… llegó el día
Pues antes de lo previsto, casi tres semanas, llegó el momento de entrar en el hospital sabiendo que en cuestión de horas conocería a mi bebé. Cómo fue el parto ya os lo conté en este post. A las 9 de la mañana llegué al hospital con la bolsa rota, tres horas más tarde decidieron inducirlo por el tema del Streptococo y porque no había síntomas de que el parto se fuera a desencadenar, y siete horas después tenía a mi bebé en brazos. Curiosamente, a pesar de ser mi quinto parto vaginal, fue el más largo de todos, sin contar el de Carmen por cuestiones obvias.
Cuando entré en Urgencias, la señora del mostrador me reconoció al seguirme por Instagram. La gine que me vio en Urgencias ese día también me recordaba por haber ido una vez allí asustada durante el embarazo. Y según entré en la habitación que me habían asignado, la chica que estaba allí, a la que mando un beso y espero que su prematuro esté bien, también me reconoció. Y entonces ya supe que mi parto empezaba a generar cierta expectación. Daos cuenta que vivo en una ciudad de menos de 300.000 habitantes y prácticamente todos los días alguien me para y viene a saludarme con mucho cariño.
El personal médico estaba muy pendiente de mí porque, al fin y al cabo, la historia de Carmen había trascendido meses atrás y era un parto distinto. Un parto tras una experiencia traumática y un parto en el que los padres no sabíamos el sexo del bebé, lo cual hoy en día es atípico en España. El caso es que esas horas previas a dar a luz lo noté, sentí que venía una niña. Cuando sabes leer caras, miradas, cuando sabes interpretar frases, entonces lo palpas. Todo el mundo deseaba que fuese una niña y obviamente el equipo médico lo sabía porque aparece en el historial, así que es difícil disimular ciertas cosas. Y eso que, ya con dilatación casi completa, una chica entró a preguntar qué nombre teníamos para niño y para niña. Yo respondí: Aurora. Mi marido, que era el encargado de elegir nombre de niño, seguía sin tenerlo claro (tenía Álvaro y Lucas como opciones, que sé que algunas tenéis curiosidad) y contestó que lo decidía cuando le viese.
Ese momento en que te dicen «es niña», y además ya tienes el alivio de que está todo bien, no tiene precio. Porque te has pasado meses sin saber nada, pensando muchas veces qué será lo que llevas dentro, con esa incertidumbre, con esos nervios al final del embarazo de querer preparar cosas pero sin preparar nada, con esa espina de haber perdido otra hija… Decir que me puse a llorar en ese instante no sería verdad porque ya entré en paritorio llorando. Fue oír en la sala de dilatación que ya estaba completa y que estaba a punto y ya no pude parar de llorar. No sé si lloré más por acordarme de cosas del parto anterior, por oír el llanto o por saber que era niña.
Descubrir el sexo del bebé en el parto, ¿es una experiencia bonita?
Pues os diría que es una experiencia preciosa y que creo que deberíamos vivirla una vez en la vida. Que nuestro caso es especial pero que, si volviera a vivir sin haber pasado lo que pasamos, lo haría en el primer parto, cuando no solemos tener preferencias por un sexo u otro. O cuando tienes preferencia y quieres tener sorpresa. Porque creo que a un hijo lo quieres desde antes de nacer y te enamoras en el instante en el que le ves. Sea del sexo que sea. Así que, si alguien por aquí se lo plantea, le diría que lo hiciese.
Y si alguna más tomó esa decisión y quiere compartir en los comentarios su experiencia para que lo lean otras mujeres, seguro que será bienvenida.
37 Comentarios
Ana (Pequeña Hormiguita)
10 enero, 2019 at 8:28 amMe ha emocionado cómo lo has contado.
Sabes que yo en ninguno de mis embarazos quise saber el sexo, porque lo único que quería era que los peques vinieran sin problemas.
En ningún caso, yo tuve un 6º sentido para saber el sexo, y sí que puedo decirte que en mis informes siempre ponían: «no quiere saber el sexo»
Enhorabuena de nuevo por esa peque
Irene
10 enero, 2019 at 9:31 amNo soy madre, pero te sigo desde hace mucho tiempo porque me encanta cómo enfocas la maternidad y porque también soy periodista y escribo, también. Yo soy la primera de dos hermanos y mis padres no quisieron saber mi sexo. Mi madre siempre cuenta que me abrazó llorando, que sintió una gran emoción y que después de que algún médico o enfermera me cogiera para limpiarme, etc, ella dijo: “ay, ¿pero qué ha sido, niño o niña?”. Al ser la primera prefirieron sorpresa. En la sala de espera nadie sabía nada y cuando preguntaron por familiares de Irene, nadie se levantó. Mis tíos y abuelos discutían, unos creyendo que era Irene la recién nacida y otros negándolo puesto que Irene era un nombre demasiado moderno (año 1992, pero ni que fuera un nombre hawaiano) Eres ejemplo de fortaleza, enhorabuena por la familia que tienes, Carmen. Un abrazo.
Mari carmen
10 enero, 2019 at 10:34 amSiempre que te leo acabo llorando me emociona muchisimo como explicas las cosas parece que las estoy viviendo muchisimas gracias por compartir conmigo cosas tan íntimas y bellas eres un cielo de persona
Planeando ser padres
10 enero, 2019 at 10:35 amYo hubiera sido incapaz de aguantar la incertidumbre en el primer embarazo, porque estaba obsesionada con la niña. Con el segundo me lo planteé, porque prefería un niño pero no con ese deseo de la primera vez. Sin embargo ¡tenía que saberlo! Ya no creo que vayamos a tener más, pero pienso que es una forma muy especial de esperar a un hijo.
Mami de O
10 enero, 2019 at 10:54 amNosotros tampoco quisimos saber el sexo de baby. Fue muy fácil la verdad, pensé que me costaría más o que me pondría nerviosa pero no fue así! Lo peor fueron los millones de comentarios y la cantidad de cosas que la gente llega a decir…”si te has caido es porqué es una niña”, “tienes una cara preciosa, es niño”, “te has sentado en el lugar izquierdo, es niña”….. y todo el mundo afirma saber el sexo: “a que no sabes que es? Vale pues no te digo lo que será entonces..” como si la gente de la calle llevara un ecografo encima!!! Me volvi loca!!!
Pero llegó el gran dia… con espinilla clavada porque a último momento y dilatada de 9cm por una bradicardia me hicieron cesarea y papi no pudo vivir la sensación de ver nacer a O y de saber instantaneamente el sexo. Pero fue una preciosa niña!! Y una de las enfermeras muy atentas envio a papi nuestra primera foto y yo mediante un audio de whatsapp pude decirle el sexo! (Benditas tecnologías en estos momentos, papi lo agradeció y respiró tranquilo al recibirlo)!!! Con un segundo baby no se que haré, supongo que vivir de nuevo esta maravillosa sorpresa!
Enhorabuena guapa, disfruta de tus polluelos!
Bei
10 enero, 2019 at 11:04 amYo no lo he sabido con ninguna de mis hijas hasta el parto, es una sensación indescriptible. No me puedo imaginar lo sanador y especial que fue para ti ese momento, me alegro muchísimo. Cuidate Carmen, un beso grande.
La agenda de mamá
10 enero, 2019 at 12:23 pmQué bonito Carmen!! Nosotros la primera vez no quisimos saberlo, pero se vio muy claro en una eco. La segunda vez hubiera sido feliz si me lo hubiera dicho el pipi test… y ahora, ahora toca el desempate!! casi 24 semanas y no sabemos aún qué será 🙂 Espero que no se le escape a ningún sanitario antes del parto… jeje
Un abrazo
Rossalie
10 enero, 2019 at 12:24 pmCuando me quedé embarazada, también decidimos en casa que no queríamos saber el sexo de los mellizos. Lo hablamos y parece que estábamos de acuerdo. Cuando llegamos a la ecografía (no recuerdo cual, pero muy pronto), nos dijeron: «Quereis saber el sexo de los bebés?» Y al unísono: YO: no; el papá: sí. Casi le fulmino con la mirada!!! … pero me dijo que no se pudo resistir. El ginecólogo no sabía que decir, nos dijo que si queríamos nos podía dar un rato para que lo hablaramos. … al final, cedí, y nos dijeron, con una seguridad pasmosa para lo pronto que era, que era un niño y una niña. Mi marido super contento porque quería un niño. En la siguiente eco nos preguntaron si ya lo sabíamos. Le contamos los resultados que nos dieron y el gine de aquel día nos dijo que no lo tenía tan claro porque el veía 2 niñas!!! Madre mia!!!!… la siguiente fue definitiva. Nos dijeron que seguro que era un niño y una niña… que el puntito que se vía en el niño «era la prueba del delito» jajajaja…. y así fue. Maridín respiró aliviado y le dije… los vas a querer a los dos igual, pero cuando la veas, te vas a enamorar. Nos enamoramos de los dos en realidad.
Jo!… pero me hubiera gustado que fuera sorpresa. En fin. La vida.
Miriam
10 enero, 2019 at 12:24 pmHola! Cuanta emoción hay en este texto y creo que voy a copiarte la idea.
Tengo dos nenas preciosas pero a mi marido le queda la espinita del nene. Queremos intentarlo una vez más y creo que lo mejor sera que sea sorpresa para que nadie se lleve una desilusion. Luego, en el momento del parto y al ver que todo va bien, todo sera alegría aunque sea otra nena!
Bea
10 enero, 2019 at 12:51 pmHola Carmen! Nosotros tampoco lo qusimos ssber…bueno, en realidad al principio fue una cabezonería de mi marido y yo me agobie un poco con el tema de los preparativos, xq no sabia que comprar y lo poco k compré en colores neutros…pero luego ha sido una experiencia maravillosa….la mia tb fue niña y se llama Carmen!! Y sin duda, si tienen k venir más, repetiré con saberlo en el momento del nacimiento! Enhorabuena por tu niña!!!
Azu
10 enero, 2019 at 1:09 pmEn mi primer embarazo tampoco lo quisimos saber, y en el momento del parto me preguntaron que que pensaba que era, siempre intuí que niña pero nos daba exactamente igual. Cuando nació la matrona me dijo que había acertado pero con la emoción ni me enteré, pasaron unos minutos hasta que me di cuenta de que era una niña
Patricia
10 enero, 2019 at 1:25 pmQue bonitas palabras,y si que debe ser una experiencia única, me alegro que tú intuición no te fallara, un beso muuuuy fuerte
María
10 enero, 2019 at 1:45 pmHola guapa, enhorabuena por tu bebé,
Te sigo desde hace tantos años que me alegro mucho que por fin llegara tu niña. Emociona todo lo que cuentas.
Yo tengo un niño y una niña, y cuando a veces me planteo el tercero, tengo claro que llegaría hasta el final sin conocer el sexo del bebé y reencontrarme con la vida con ese momento tan bonito del parto.
Un fuerte abrazo
Marta
10 enero, 2019 at 2:22 pmYo no supe el sexo del bebe en ninguno de mis embarazos. En el momento del parto cuando le ves l cara, y en mi caso, me los saqué y saber el sexo en ese momento y por tanto el nombre es una experiencia preciosa. Animo a las chicas que estén indecisas, por que es muy bonito ver crecer a un ser en tu interior sin pensar solamente si estará bien.
Adela
10 enero, 2019 at 2:30 pmQué bonito! Yo tb me enteré en el parto pero por un error médico… me dijeron que era niña, tenía ya el nombre, ropita, cuarto decorado… no super rosa pero con bastantes cosas y cuando nacio oi que la matrona decía extrañada «pero si es niño!». Fue un shock y me quede super bloqueada hasta que me lo pusieron en brazos, ahí me dió igual todo, como si hubieran sido 2 en vez de 1, estaba super féliz con mi bebe niño que luego fue co ocido en el nido por la anecdota y por sus pijamitas rosas jajajaja
Rosa
10 enero, 2019 at 2:44 pmNosotros no quisimos saberlo en el tercero, los 2 anteriores niños, a mi me daba igual el sexo, porq venía de un embarazo ectópico q casi me cuesta la vida, pero todo nuestro entorno quería niña y yo q todo fuera bien, me daba rabia oír lo de la niña, así q decidimos no saber el sexo y así «no defraudar» a nadie, pero no fué posible, somos sanitarios los dos, en la primera eco decidió mostrarnos los genitales, así de primeras 😂😂😂😂 y sí, fué otro chico!! Otro maravilloso y sano niño!!!! Así q tuvimos q aguantar todo el embarazo oír eso de, «oh, q pena, no? otro niño». Pues no, ninguna pena!! Era la contestación. Quisimos guardarnos para nosotros la información, pero se nos escapaba sin darnos cuenta….. Enhorabuena Carmen!
Elena
10 enero, 2019 at 2:49 pmTengo dos chicos y aun no sabemos si nos animaremos a por un tercero. De momento no. Yo querría pero mi marido dice q ni hablar jejeje. En el segundo embarazo nos dijeron que era niña, le pusimos nombre y hasta compré alguna cosita. De repente nos dijeron q se habian equivocado y q era niño. Me lleve mucho disgusto y encima me sentia mal por sentirme mal, me sentia mal por el bebe x preferir q fuera niña…luego todo fue muy bien y adoro a mis dos niños pero ese sentimiento de culpa me persiguió durante todo lo que restaba de embarazo.
La cuestión es que si fuéramos a por un tercero tendría preferencia por una niña y cuando leí tu post de que no queríais saber el sexo le dije a mi marido si algún día tengo otro embarazo será sorpresa y así al verle la cara me dará igual su sexo. Hoy tu post me ha emocionado. Gracias!
Raquel
10 enero, 2019 at 3:47 pmYo he sido mami de 2 niños y estoy loca por una niña. De hecho si me dijeran que la tercera es niña me ponía mañana mismo ya jajajajaja igual es una buena opción no saberlo, porque sé que si es un tercero me pondría fatal al principio del embarazo ya… 🙁 lo suyo me costó hacerme a la idea de mis dos gemelos, yo que siempre me proyecté mami de niñas…
mamá puede
10 enero, 2019 at 4:04 pmTiene que ser precioso descubrir el sexo en ese momento, pero no creo que yo pudiese aguantar 🙂
Lo que me alegra saber es que los médicos que te atienden cuidan esos detalles y que no digan nada.
Sara Granda
10 enero, 2019 at 4:12 pmHola,
Yo no podría aguantar. Cuando estaba embarazada de Lara nos dijeron que parecía niño, enseguida una de las abuelas compró bodis en azul y yo…espera que aun no es fijo (algo en mí sabía que era niña) y ya vez que niño tuve!!! jajaja No volveré a pasar por esa experiencia pero yo creo q no podría, soy una ansia viva. Enhorabuena de nuevo por esa niña tan preciosa, Aurora has traído mucha luz a este mundo
Lols
10 enero, 2019 at 4:13 pmYo creo q hiciste muy bien en esperar. Yo siempre desee una niña y lo pase muy mal con el segundo cuando me dijeron que también era chico. Estuve un día entero llorando y aún echo de menos una niña, ya q no tengo hermanas ni madre desde hace ya muchos años y a ella Le hubiese encantado.
NJ
10 enero, 2019 at 8:13 pmYo pase la misma experiencia que tú Carmen hace unos meses. Hemos decidido que cuando nos pongamos manos a la obra de nuevo tampoco querremos saber el sexo hasta el día del parto, me pareció una gran idea cuando te leí y se lo comenté a mi marido y le pareció fantástico, espero también llevarlo igual de bien que tu, eres un gran ejemplo, te admiro mucho!
Lola
10 enero, 2019 at 10:36 pmYo tengo dos chicos! Y a pesar de que mi madre nunca quiso saber el sexo de nosotros hasta el parto a mi me puede el ansia! Del segundo me hubiese gustado tener una niña… fuimos al privado a hacer una eco a ver lo q era… antes de decirnos el sexo del bebé detectaron un problema en el saco del bebé (algo que aunque me estubo asustándo todo el embarazo y me llevó a tener un embarazo de alto riesgo pero gracias a dios no llego a nada) después me dijeron que era otro niño. Me dio tan igual!! Solo queria que estubiese sano!! Ahi me di cuenta de q no importaba el sexo, solo un bebé sano…
Leticia
10 enero, 2019 at 11:03 pmQ bonito Carmen, lo he leído varias veces xq es emocionante, cada frase, cada palabra… Es un texto precioso. Yo tengo 2 nenas y me lo dijeron en la semana 20, si tuviera otro creo que me gustaría no saberlo, jeje, de hecho mis padres conmigo no lo supieron hasta que nací.
Espero que seas muy muy feliz y estés tranquila y en paz contigo misma. Muchos besos
Wilson, Papá DivertidOOs
11 enero, 2019 at 4:04 amVaya montón de gente de los que estamos en el grupo que «no quieren saber el sexo» antes del nacimiento. Pensé que eramos menos, pero al leer el post y los comentarios casi que uno puede pensar que no es la tendencia generalizada, jejejej, pero sé que no es así.
Que bello es sentir esa incertidumbre durante el embarazo, como lo dices «es una experiencia preciosa y que creo que deberíamos vivirla una vez en la vida»
Saludos
Noelia
11 enero, 2019 at 11:17 amDe verdad que me quedo estupefacta con vuestros comentarios…¿Queréis hijos o instrumentos y juguetes? No entiendo nada…son personas. La preferencia será que venga sano y bien. Y si de verdad quieres tener hijos te importa un bledo si son niños o niñas. Si a los padres biológicos les hicieran la cuarta parte de pruebas y test que hacen a los padres que adoptan desde luego que ya nos habríamos extinguido viendo lo visto. Me da pena, por llamarlo de alguna manera el concepto que se tiene de ser padres, que es el de jugar al nenuco. Así va el mundo…
nosoyunadramamama
14 enero, 2019 at 2:08 pmEso por descontado. Jamás me disgustó saber el sexo de mis hijos, me reí cuando supe que el tercero era otro varón, y no entendía que la gente se disgustase por tal cosa. Y como no sabía si esta vez podía pasarme por lo que me ocurrió, preferí no saberlo, porque lo que tenía claro es que deseaba ese bebé como los 4 anteriores. No creo que el hecho de que la gente tenga preferencia sea malo, sinceramente me parece totalmente fuera de lugar este comentario.
Julia
11 enero, 2019 at 6:32 pmAcabo de llegar a tu web y me ha emocionado mucho leer tu historia. Enhorabuena por tu niña y desearte todo lo mejor. Tienes una sensibilidad especial para escribir y eso traspasa la pantalla. Gracias por contar tu experiencia de una manera tan cercana.
Marta
11 enero, 2019 at 10:22 pmCarmen, vuelvo a llorar!!! Desde luego me has convencido, si decido ir a por mi cuarto bebe, te voy a hacer caso, lo has pintado taaaan bonito. Eres alucinante!! Te mando un abrazo gigante
Constanza
14 enero, 2019 at 5:44 pmQue hermoso poder vivirlo de esa manera. Mi pareja es una persona tan ansiosa que no me ha dejado quedarme con la intriga, pero le mostraré este artículo para que lo tenga en cuenta (para nuestro próximo hijo)
Noelia
15 enero, 2019 at 8:56 amEs que disgustarse por saber el sexo de un hijo ya no sé ni cómo describirlo sinceramente…mira, yo entiendo que siendo padre primerizo puedas verte más con una niña en el caso de las madres por eso de que tú también fuiste una niña y crees que te va a ser más fácil, y viceversa en el caso de los padres, pero hasta ahí. Ahora ya lo de tener una preferencia tan marcada por un determinado sexo (aquí hay gente que habla de obsesión y de que lloró cuando se enteró del sexo), me parece de tener un concepto totalmente desvirtuado de lo que es tener hijos, además de egoísta. Porque un hijo no es un instrumento para divertirnos, complacernos, llenarnos, satisfacernos y cumplir expectativas personales nuestras. Un hijo es una persona que tú decides poner en el mundo con todo lo que eso conlleva, que es mucho y que entiendo que sobradamente sabes…Dicho todo esto, solo darte la enhorabuena por tus hijos, que por cierto, cada uno a su manera son calcos tuyos!! Y como siempre dices, a disfrutar sin dramas…yo de verdad que me lo intento aplicar en todas las facetas de la vida. Un saludo!
nosoyunadramamama
15 enero, 2019 at 12:58 pmEn eso estoy de acuerdo, lo de disgustarse por el sexo del bebé no lo entendí nunca, y como yo nunca fui así y tenía miedo a que me pasase en el embarazo por lo que me había sucedido con Carmen, preferí esperar al parto sabiendo que en ese momento me parecería maravilloso solo el hecho de escuchar el llanto de mi hijo/a. Efectivamente, un hijo no es algo para satisfacernos, entre otras cosas, porque no van a ser lo que nosotros queramos..Gracias! sí, los genes del papi no pintan mucho 😉
Marina
16 enero, 2019 at 12:54 pmYo tampoco supe el sexo de mi bebé hasta que nació. Ni mi marido ni yo teníamos preferencias de sexo, así que no supuso ningún problema y nos pareció que sería emocionante descubrirlo juntos cuando naciera. Cosas de la vida, el parto terminó en una cesárea de urgencia y fui la primera en saber que era un niño, mientras mi marido y toda la familia lo supo después, cuando la pediatra les entregó al niño mientras yo me recuperaba de la intervención. Me da pena no haberlo descubierto juntos ni haber podido anunciarlo a la familia juntos, así que en el próximo embarazo volveremos a repetir, a ver si esta vez hay más suerte.
Cecilia
30 enero, 2019 at 6:50 pmCarmen , cuanto me alegro que todo haya ido bien y sabes que muchas personas estábamos pendiente de ti y de Aurora. Yo de la segunda me lo.dijeron que podía ser niña de 11+3 y en la 20 la ginecóloga ni siquiera me pregunto si quería saberlo ni nada y directamente dijo niña ala enfermera para que lo apuntará. Dije es niña?? Y me dice si, vaya manera más fría de decirlo y ni siquiera preguntarme que es lo que yo quería. Si tuviera un tercero no querría saberlo, tú historia me ha conmovido. Muchos besos
Carla
4 febrero, 2019 at 2:30 pmNosotros no queríamos saber qué iba a ser y se lo dijimos al ginecólogo nada más entrar. Nos fue explicando con todo detalle lo que veíamos… incluida la colita. La cara de mi marido y la mía eran un poema. Se disculpó mil veces, dijo que como todos quieren saberlo se le había olvidado. Intentó arreglarlo diciendo que podía cambiar, pero era obvio que esa cosa que sobresalía era lo que era. En fin, se quedó en una anécdota para contar. Bueno, y la gente a la que le quitaba el sueño no saber qué iba a ser y la que se moría por acertar si iba a ser niño o niña se quedó más tranquila.
Karma Mamá
5 febrero, 2019 at 1:14 pm¡Brutal! Reconozco que alguna vez antes de quedarme me lo había planteado y aguantar hasta el momento de conocernos para saberlo pero ahora que lo estoy ¡ay no se si aguantaría! También porque es el primero y tengo taaaantas ganas de verlo en las ecos y conocer todo sobre como evoluciona no creo que sea capaz.
Lo plantearé al papi, pero creo que él tienen aún más ganas que yo, jeje
Gracias por compartir tu experiencia
Embarazadasymamas
3 agosto, 2019 at 1:04 pmEl momento en el que descubres el sexo de tu bebé no tiene precio, es más emocionante mantener la sorpresa pero quererlo igual en todo momento!
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