Cuando eres madre, comienzas a entender ciertas cosas de tu infancia. De alguna manera, mirar a tus hijos es verte de nuevo a ti hace muchos años, con otras perspectivas y otra forma de entender la vida. El otro día, me llegó una foto por whatsapp de Alfonso y sus compañeros de clase; estaban en el autobús e iban de excursión a una granja. Miré la imagen una y otra vez, vi sus caras y ahí estaba reflejada esa misma ilusión que yo sentía de niña con planes así. Sólo el hecho de subirme al autocar con mis amigas ya me parecía lo más. El pasar el día con ellas sin pisar el cole, el librarme del uniforme e ir vestida con unos vaqueros, el comer de bocadillo… con tan poco, era capaz de hacerme la persona más feliz del mundo.
Y eso es lo que vi en la cara de mi hijo y en sus nervios ya el día anterior. Hice lo mismo que en su día hacía mi madre: ir a comprar patatitas con él, porque de eso no tenemos habitualmente en casa ni tampoco había en la de mis padres cuando éramos niños. Era algo que sólo se comía en ocasiones especiales y así sucede ahora con mis hijos. Cosas tan simples como ésas se convertían en algo único. Reconozco sentir cierta nostalgia; a día de hoy no necesito cosas fuera de lo común para disfrutar pero esa capacidad de goce se pierde de alguna manera cuando somos adultos. Ya no existe esa espontaneidad que veo en Rafa cuando, de repente, está dibujando y, sin ton ni son, decide coger su disfraz de Spiderman y enfundarse en él.
Es increíble pero algo tan sencillo como un colchón sin sábanas les da un juego… Cuando yo veo una cama sin cubierta, lo único que pienso es vaya faena. Cuando ellos se la encuentran sin colcha ni nada, no piensan en nada más que en subirse a ella y dar saltos como si no hubiera un mañana. Esas respuestas que tienen, esas ideas locas, esas capacidad de improvisación, de emocionarse con todo… eso es algo que perdemos. Ojo, que luego tienen lo suyo, ehhhh… Pero hoy, me quedo con esta parte recalcando que, de vez en cuando, es bueno fijarnos en ellos para no olvidar que un día fuimos así.
36 Comentarios
Eva
9 mayo, 2016 at 7:27 amQue bonito Carmen!!Pues si, esa ilusión e inocencia a mi me tienen cautivada. Es una maravilla verles crecer y descubrir el mundo. Y volver a tener un poco de esa espontaneidad para que no te de vergüenza bailar por la calle 😄😄
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 3:58 pmexacto!!! sólo cuando vas con tu hijo, te atreves a ir bailando o cantando por la calle!!! eso, o cuando vas piripi, pero ya no estamos para esas cosas, jajajaaja
La maternidad de Krika en Suiza
9 mayo, 2016 at 8:34 amY que bonito esa capacidad de ilusionarse que tienen! Sí que es cierto que conforme nos vamos haciendo mayores parece que la vamos perdiendo, y es toda una pena!
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 3:59 pmverdad??? yo vi esa foto y la cara de Alfonso y pensé: qué envidia!!!!!!!!!!!!
immaangles
9 mayo, 2016 at 9:40 amBonita reflexión!! Pero yo voy a ir un poco más allá y creo qie, precisamente, nuestros hijos nos dan la oportunidad de recuperar esas ideas locas, esos placeres pequeños y esos momentos emocionantes con muy poco. Y no se trata de hacer cosas impropias con ellos si no, simplemente, ponernos las mallas y sacarnos las zapatillas y dejarnos ir un rato de su mano. Ayer mismo hacia un día horroroso en Barcelona y pasamos la tarde en casa, pues juntamos todos los cojines de casa en la habitación de los peques y no veas cómo nos lo pasamos… Todos!!! Además que ellos alucinan cuando nos ven jugar así y les encanta vernos en ese registro! Creo ademas que es muy educativo ver que podemos ser serios cuando toca… pero que también nos encanta reir, saltar sobre cojines y jugar!! Anda cómo me he enrollado al final! Feliz inicio de semana Carmen!!!
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 4:04 pmefectivamente, son los niños los que nos permiten volver atrás en el tiempo!!! porque sólo con ellos te atreves a cantar por la calle o a saltar en la cama!! totalmente de acuerdo en eso de que deben vernos y saber que tenemos distintos tipos de registro, que hay veces que hay que ser serios y hay veces que no… Un besin
Mami esto está chuli
9 mayo, 2016 at 9:42 amYo soy una enamorada de esa iñusión. Es tannn bonita. Que pena que se pierda según crecemos pero con ellos se vuelve a recuperar. Mi pequeño esta loquito porque tambien se va de excursión.. Todos los días me pregunta. Un beso
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 4:04 pmjajaja, lo de las excursiones debe ser lo más, visto lo visto… Si es que con los compis de clase lo pasan ta bien!!!!! Un besin
Una mamá muy feliz
9 mayo, 2016 at 9:46 amAinsssss son increíbles!! yo entiendo muy bien a UNMF porque como tu dices, es tan igual a mí, me veo tan reflejado en él, que no tengo más que mirarlo para sber que está sintiendo y que le hace feliz…ojalá ese niño que todos llevamos dentro nunca se hiciese mayor.
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 4:06 pmA mí me pasa con Alfonso, que es muy movido como yo, nervioso, muy expresivo… y lo veo y me hace gracia!!! Rafa es que más pachorro y exterioriza menos… pero vamos, es el de las ideas locas, yo me meo con él!!! Son lo mejor del mundo!!
Mama Puñetera
9 mayo, 2016 at 10:53 amCuanta razón! Parece que nos hacemos mayores y nos olvidamos de que algún día fuimos así, felices con las cosas mas mínimas, capaces de emocionarnos con todo… Es bueno tenerlos a ellos para volver a conectar con nuestro niño interior…
De hecho, Valkiria se va esta semana de granja escuela y lleva una semana emocionada! jajajaja
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 4:08 pmsi, de alguna manera se nos olvida… por eso, verlos es tan emocionante!!! ufff, ya verás cómo lo pasa en la granja escuela, aunque solo sea por el plan de hacer algo distinto, jajaja
MamadeunSurvivor
9 mayo, 2016 at 10:53 amQue tiempos aquellos en los que se iba de excursión con el cole, como tu dices: sin uniforme, autobus y bocata. Qué bien nos lo pasábamos. Álvaro hará su primera salida cultural (y única del curso) este Junio a una granja. Me muero de ganas de sentir su emoción ☺️
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 4:09 pmyo era feliz!!!!! ya verás, cuando son pequeños igual no se les nota tanto, porque a Rafa no le veo tan consciente del plan… pero bueno, este viernes va de merendero, a ver qué tal, jajaj
mamatupuedes
9 mayo, 2016 at 10:56 amPues si!! Los niños nos hacen volver a esa parte maravillosa de nuestra vida, a mi me encanta observar a mi hijo cómo disfruta de las pequeñas cosas con esa inocencia…
muy bonito el post!
😘
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 4:10 pmsiii, verlos a ellos es una forma de revivir una parte de nuestras vidas que, fue increíble, pero la tenemos olvidada!!! un besin
mamaysuscosas
9 mayo, 2016 at 11:01 amQué razón tienes!! he disfrutado mucho leyendo tu post. Me he acordado que también mi mami me compraba patatas, galletitas y una lata de Fanta o un zumito con pajita!!! Eso era una acontecimiento!! Jajaja porque eran cosas extraordinarias que en casa no tomabas. Y ver la bolsa preparada con todos los manjares era una especie de Nirvana infantil jajaja!! A no mucho tardar me veo a mi marido con un disfraz de esos para el Príncipe polluelo. …es peor el padre que el hijo jajajaj!!! Un beso guapa.
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 10:38 pmSiii, yo también le quise comprar un refresco, que a í me encantaba pero estos prefieren agua, jajaja… Era increíble ir con la mochila con esas cosas, lo pienso y me me hace gracia, jajaj… aquí el padre tampoco se queda corto, jajaja… un besin
mamapuede
9 mayo, 2016 at 11:40 amTienes toda la razón, son tan inocentes, se ilusionan con todo y por todo y es tan bonito…
Ser madre es volver a vivir esas ilusiones otra vez
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 10:39 pmpues sí, yo de repente voy e excursión a algún sitio con los niños y tengo revivals jaja… Es increíble!!!
Nuria bb
9 mayo, 2016 at 2:50 pmSe vuelve a vivir a traves de sus ojos, es impresionante como se disfruta viendolos disfrutar con cualquier cosa por insignificante q sea. Es tan importante dejarles ser niños, tener un recuerdo bonito de la infancia, sin duda creo es la etapa que más te marca.
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 10:56 pmsiii, una cosa es ponerles límites a algunas cosas pero hay que dejarles ser niños, flexibilidad…porque son eso, niños, que se rigen por la espontaneidad!!!
Ana
9 mayo, 2016 at 3:08 pmExactamente,es así. Mi hija mayor (5) se emociona con todo.Ella empalmaría una cosa con otra:ahora El Pilar, luego Halloween,luego mi cumple,navidad ,carnaval…dice.Disfruta de todo.Ahora emocionada con ir a Dinopolis,que va con el cole. La peque de 4,también se monta sus películas. Le regalamos ahora para su cumple un disfraz de Frozen y aún no se lo ha quitado, está convencida de que es una princesa. Ojala esa capacidad de entusiasmo les dure mucho.
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 10:58 pmjajaja, les gusta más una fiesta que cualquier cosa! Pues oye, que siga con ese disfraz todo lo que quiera, yo de pequeña era de ponerme abalorios todo el día y por eso soy un pelín payasa, y me encanta!!!jaja
Mayte
9 mayo, 2016 at 3:32 pmEs uno de los aspectos mas bonitos de tener niños, disfrutar con su sencillez y recordar nuestra infancia 🙂
Me ha llamado la atención lo de las patatitas, en mi casa ocurría lo mismo. Sin embargo, en la de mis primos era habitual que se sirviera en la mesa como picoteo. ¿Os pasa lo mismo con la bollería o los congelados tipo varitas de merluza? Es decir, que lo pongáis como algo excepcional
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 10:59 pmjajaja, en mi casa no había nada de esas cosas, la bollería se merendaba los viernes, aún me acuerdo del subidón de comprar la palmera de chocolate!!! y ahora nosotros igual, normalmente meriendan fruta, bocadillo y frutos secos, y el viernes es el día que cambiamos frutos secos por algo con chocolate!!!!
Planeando ser padres
9 mayo, 2016 at 6:32 pmAhora que veo la foto de tu peque, pienso en las excursiones escolares, que empiezan tan requete pronto, a los 3 años, y no sé qué hacer. Por un lado, creo que lo pasará genial y que llegado el momento se entusiasmará y querrá ir, pero por otro lado pienso en la responsabilidad de dejarla al cargo de adultos a quienes no conozco íntimamente ¡y me dan ganas de encerrarla en casa! Con lo desahogada que soy yo para todo, y el sin vivir que me entra cuando pienso en excursiones.
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 11:02 pmanda que no eres exagerada!!!! las criaturas se pasan varias horas al día con profes, así que como para no fiarse cuando van de excursión!!! de todas formas, el primer curso yo creo que hacen una nada más, Rafa hará este viernes la primera…eso sí, han salido del cole a museos un par de veces, vino encantado con sus obras de arte!!
Isa
9 mayo, 2016 at 8:13 pmCuanta razón!!!!! Además son cosas que no se olvidan en la vida y quedan grabadas para siempre a mi me encantaba tar con mis compañeros y lo pasábamos genial cuando ibamos a la finca San Eutiquio a celebrar la fiesta fin de curso y las mamis nos daban un poco más de libertad jejejeje solo espero que mi peque lo pase el doble de bien de lo que yo lo tengo pasao y con la misma inocencia.
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 11:04 pmmadre mía, las fiestas de fin de curso, qué maravilla también!!!! desde luego, no hay otra etapa igual, cualquier cosa era lo más!!!!! siento envidia, me encantaría volver atrás en el tiempo, jaja
mamacuchufleta
10 mayo, 2016 at 12:27 amAdemás de verdad, cuanto podíamos disfrutar solo con la idea de hacer algo nuevo, diferente, aún recuerdo lo que disfrutaba cada carnaval en el cole, ir disfrazada era lo más, podíamos quitarnos la bata jajaja
Ahora veo la emoción que le causan cosas, para mi insignificantes, a Enzo, como hacer la croqueta en la cama o quedarse desnudo!
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 11:07 pmjajaja, lo de la croqueta me hace gracia porque mis hijos la hacen en una cuesta del jardín de mis padres y yo me pongo negra porque les queda la ropa verde…pero yo hacía lo mismo!!!!!!!! así que les dejo y listo, que disfruten de esta etapa tan increíble!
mamacuchufleta
11 mayo, 2016 at 10:41 amPues si, a veces hay que dejarlos ser niños simplemente aunque nos pongamos de los nervios jaja
No sin mis patucos
10 mayo, 2016 at 10:15 amEs que lo de saltar en la cama, madre mía que divertido era, recuerdo como me lo pasaba de bien con mi hermana mayor saltando como locas. Ahora veo a mis hijos y siempre me sale decirles que no lo hagan, pero enseguida recuerdo lo que a mi me gustaba y les dejo que sigan haciéndolo porque hay cosas que solo se disfrutan cuando se es pequeño.
A veces hay que dejarles como lo que son, espíritus libres y que sientan la emoción de gritar, saltar, cantar, ponerse un disfraz o lo que necesiten hacer para disfrutar y ser felices porque ya tendrán tiempo de ser personas serias y formales, jejejej
Un abrazo.
nosoyunadramamama
10 mayo, 2016 at 11:12 pmverdad???? en el fondo, también les mando parar porque se pueden caer y tenemos disgusto, jajaja…pero sí, nosotros lo hacíamos…y rodar por el prao, así dejábamos la ropa y así la dejan ellos ahora!!! La verdad es que hay que dejarles disfrutar, con tal de enseñarles a diferenciar en qué situaciones deben estar tranquilos, yo creo que sólo hay que pararse a pensar en lo que nosotros hicimos d e pequeños!
Lai - Asi piensa mamá
24 mayo, 2016 at 6:06 pmes que los peques están aqui para enseñarnos el camino a disfrutar de nuevo, esto convencida 🙂
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